lunes, 13 de abril de 2015

Pablo el vendido.

Es curioso el cacao que tiene todo el mundo hoy con la política. Si preguntas al personal sobre la ideología de los partidos políticos te llevas sorpresas. Por ejemplo, todos te dirán que UPyD y “ciudadanos” tienen la misma ideología y que esta ideología es de centro izquierda. Si preguntas por podemos te dirán que su ideología es de izquierda radical. Si por quien preguntas es por IU, te dirán que son comunistas. PP y PSOE son la derecha y la izquierda tradicionales.

A este cacao contribuyen de manera decisiva los medios de comunicación, el otro día escuché a Pepa Bueno en su programa de radio, decir que ciudadanos está en lo que podríamos decir el centro izquierda y que su programa electoral tiene similitudes socialdemócratas. Esa afirmación es absurda directamente, ciudadanos tiene de izquierdas lo mismo que Rouco de creyente.

Ciudadanos propone reducciones drásticas de las aportaciones que hacen a la seguridad social los patronos y los autónomos. Lo que supondría la finiquitación del sistema de pensiones. Proponen bajadas drásticas de impuestos, de todos menos del IVA, el más injusto de los impuestos. Proponen la reducción/eliminación de las indemnizaciones por despido. Proponen el copago sanitario y la privatización de la sanidad. Proponen…. Muchas cosas como veis, por lo tanto creo que podemos afirmar que Reagan y Franco eran más de izquierdas en materia económica que Albert Ribera. Sin embargo los medios dicen que son de izquierdas. ¿Por qué? (La pregunta es retórica, se perfectamente porque lo hacen).

A este cacao contribuyen también los políticos, el caso más claro es del PP. Hoy digo una cosa y mañana la contraria. Hoy voto una ley, mañana la modifico y pasado la modifico otra vez. Hoy digo que voy a hacer una ley contra la corrupción y mañana ya no se supo más de esa ley.

El que me ha hecho pensar en todo esto ha sido “podemos”, en otro requiebro ideológico ha dicho que lo de las corridas de toros no es importante, que ellos no las van a prohibir ni van a hacer nada al respecto. Que eso no les importa a los ciudadanos hoy, hay temas más importantes. Lo que quizás hagan es fomentar que no se paguen las corridas con dinero público (no sería poco si lo hicieran).

Claro, uno ve que para podemos casi nada es importante, la jefatura del estado y quien la ostenta tampoco es importante, a los ciudadanos les preocupan otras cosas. Por lo tanto vemos, que salvo la deuda, el paro y la corrupción, todo lo demás es poco importante y no le importa a la mayoría. Pablo me recuerda a otros afamados estadistas como Felipe, José Mari o Mariano. Todo es secundario excepto lo que les sale de los huevos a ellos.

Pero siendo Pablo como es, pronto se volverá un fanático de los toros. De ser anticapitalista ha pasado a alabar con grandes alabanzas a la Botín. De ser ateo ha pasado a alabar con grandes alabanzas al videlino (conocido también como papa de Roma). De ser republicano ha pasado a alabar con grandes alabanzas al rey de todas las Españas. De ser anti taurino ha pasado a sudarle el nabo la tortura animal.


Sinceramente, que se vaya a la mierda el vendido.

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